La obra de Pierre Molinier es prácticamente desconocida para el gran público mientras es objeto de culto y admiración por unos pocos. Todo su trabajo es de una radicalidad extrema en el que trata de crear cuerpos fantaseados ayudándose sobre todo del fotomontaje, que le permite alcanzar ese cuerpo imposible que la sociedad le prohibe. Molinier monta, corta, multiplica y trasviste su cuerpo hasta el infinito intentando así que su cuerpo real y el deseado coincidan. Utilizaba su propio cuerpo como objeto artístico mediante el que cuestionaba la representación del sexo, llevando el Body Art y las Performances a un extremo al que pocos han llegado. Impactante, escandalizador y misterioso.
Para realizar algunos de sus autorretratos en los que se practicaba una autofelación, él mismo inventó una especie de artilugio en forma de ocho (8). Completamente desnudo metía sus piernas en este ocho, subiéndolo hasta por encima de sus rodillas, acostándose boca arriba en la cama o en una mesa, levantando las piernas y subiendo las rodillas hasta las orejas. Otras veces no le hace falta el yugo, y simplemente cruza las piernas elásticamente detrás del cuello. Una vez en esta posición se introducía el dedo anular de la mano derecha en el ano y con la mano izquierda cogía su propio pene erecto para metérselo en la boca y empezar a lamerse y chuparse. La cámara de fotos disparaba de forma automática registrando así toda la acción foto a foto, hasta que obtenía un orgasmo y eyaculaba en su propia boca.
Sus últimos años los pasó solo en un sucio apartamento de Burdeos.
Pierre Moliner se suicidó el 3 de Marzo de 1976, pero su última Performance no fue registrada por la cámara. Pero su suicidio fue un acto voluntario realizado por una persona totalmente lúcida.
Algunos datos sueltos de Pierre Molinier dan idea de que estamos hablando de alguien muy especial, que vivió casi siempre de forma solitaria y que se creó una fama de violento: se inició bastante joven en el sexo, aseguraba haberse sentido interesado en las piernas femeninas desde las edad de 3 años, haber acariciado las de su hermana a los 10, hizo el amor por primera vez a los 13 con una prostituta, violó el cadáver de su hermana a los 15 años después de fotografiarla en su lecho de muerte "(...incluso muerta era hermosísima! Eyaculé en su estómago y piernas, y en el vestido de primera comunión que llevaba puesto. Se llevo con ella lo mejor de mí!)". A los 18 años tomó clases de baile regional vestido de mujer.
En el año 1999 el IVAM de Valencia le dedicó una exposición que reunió alrededor de cien obras (especialmente fotografías y fotomontajes, además de pintura, dibujos, grabados, objetos eróticos, el cortometraje Mes jambes (1965) del propio Pierre Molinier y una grabación sonora), procedentes de colecciones y centros de arte de París, Burdeos y Nueva York. En el catálogo de la exposición se publicaron, por primera vez en castellano, unos poemas de Pierre Molinier.
Bibliografía:
G. CORTÉS, José Miguel, "Je Suis Lesbien(1). (Pierre Molinier o el cuestionamiento de la virilidad)".
BOURGEADE, Pierre, "Un onanista en contra de Dios", Revista Matador, 1998.
ALIAGA, J.V : COLAIZZI, G. "Pierre Molinier", IVAM, 1999.
BELLMER, H. "Pierre Molinier". Londres, 1993.
